martes, octubre 17, 2006

El humor en la política.

Diálogo


Cuando faltan cuatro meses para la realización de la elección presidencial; entre los candidatos alternativos al actual mandatario, el que mas respaldo tiene llega a 12 puntos en las encuestas; además de tener un panorama en que los desilusionados del gobierno y de la oposición (mal llamados NI-NI) representan a la mayoría. Todos los sondeos de opinión pública revelan que el 75% de los venezolanos, consideran que Venezuela se merece un mejor gobierno, significando que el 45% de los que en la actualidad respaldarían al presidente, apoyan esta afirmación; lamentablemente hasta ahora, nadie ha logrado encausar dicho sentimiento.

Recordemos que Hugo Chávez, apenas tiene 14 años que salió a la luz pública como factor que aspiraba el poder (desde aquel “Por ahora” del 4 de febrero de 1992). Hasta comienzos del 1998 (hace 8 años) tenia 6% en las encuestas, pero en vista que fue un producto que logró interpretar los deseos y necesidades políticas de la población, llegó a calar en los corazones en muy poco tiempo. El hecho que la candidatura, hasta ahora, sin precisión de su seriedad, del humorista conocido como El Conde del Guacharo, ha significado un fenómeno político-social digno de análisis, dado al respaldo espontáneo que ha comenzado a tener en todo el territorio nacional y el impacto noticioso que tiene repercusión internacional.

Carismático, sincero, popular, crítico y hombre visto como exitoso, son partes de las cualidades personales del Conde del Guacharo; pero resulta que coincidencialmente son las características o virtudes que la población aspira de sus nuevos líderes. Históricamente, el humor ha estado ligado a la crítica política, contando a su favor con la forma inteligente y graciosas en que se emiten dichas críticas. Recordemos que entre las características del venezolano, destaca el humorismo con que se asumen las situaciones mas difíciles que nos tocan vivir, al punto que la "Rochela", fue la forma despectiva, con que calificaban los cantos y bailes que realizaban los esclavos, luego de la larga jornada de trabajo.

El hecho que la población, haya tenido que optar por una figura militarista, en su desespero de salir del bipartidismo; hoy en día un humorista tendría perfecta aceptación, cuando la rabia, el miedo, la tristeza e inconformidad ocupan los primeros lugares entre los sentimientos de la mayoría del país. La fragilidad en la fidelidad política, es una característica de los últimos 17 años, puesto que el pueblo ha venido explorando la mejor opción para avanzar en su calidad de vida, de allí el traslado en el respaldo político que en tiempo atrás tuvo Andrés Velásquez, Irene Sáez, Rafael Caldera y el propio Hugo Chávez.

Venezuela es un país de sorpresas, por lo tanto no dejemos de observar al Conde del Guacharo y su estrategia política, factores que lo respaldan y en todo caso, comprobar la seriedad de su aspiración presidencial.

Lic. Gilberto Román
Economista
Web: dialogo.ya.st

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